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Cómo equilibrar la estructura y el juego libre en casa

Desde pequeños, los niños necesitan aprender a ser independientes y a tomar decisiones por sí mismos. Por eso se fomenta el juego libre en los niños, ya que les da la oportunidad de elegir lo que quieren hacer y cómo quieren hacerlo en un entorno controlado y seguro.

Al mismo tiempo, los niños también necesitan una estructura en sus vidas, ya que les enseña la importancia de los horarios y les tranquiliza en cuanto a su seguridad.

Encontrar este equilibrio perfecto entre estructura y juego libre en casa puede ser un reto para cualquier padre, pero especialmente para los padres de niños con trastorno del espectro autista (TEA).

A continuación, hablaremos de cómo equilibrar la estructura y el juego libre en casa para los niños con autismo, incorporando muchas estrategias y herramientas utilizadas en el análisis aplicado de la conducta (terapia ABA).

Principales conclusiones

  • Los niños con TEA se benefician de una rutina constante y estructurada.
  • El juego libre es esencial para fomentar la creatividad y la independencia.
  • Las herramientas visuales, como los horarios y los temporizadores, reducen la ansiedad y facilitan las transiciones.
  • El refuerzo positivo refuerza los comportamientos deseados.
  • Incorporar flexibilidad enseña a los niños a adaptarse y a sentirse valorados.
  • La participación de los padres es clave para equilibrar con éxito la estructura y el juego.

Índice

Estructurar el día

La estructura es la base para encontrar este equilibrio, y empieza por crear una rutina coherente. Todas las familias tienen cosas que hacer al día, y a menudo hay que hacerlas a una hora determinada o en un orden concreto.

Por ejemplo, vestirse, desayunar, ir al colegio y al trabajo, hacer los deberes, preparar y cenar, bañarse y prepararse para ir a la cama y acostarse a la hora.

A los niños con TEA les gustan las rutinas constantes. A menudo se sienten más seguros y menos ansiosos cuando pueden predecir lo que va a ocurrir a continuación.

Los padres pueden proporcionar esa columna vertebral a sus hijos creando un horario visual que desglose las distintas tareas del día. Así los niños ven paso a paso lo que tienen que hacer y en qué orden.

Pueden ver imágenes de la tarea actual, de la siguiente, de la siguiente, etc.

Para ayudarles a pasar de una tarea a otra, los padres pueden utilizar temporizadores visuales. Pueden ayudar a los niños a entender cuánto tiempo queda para la tarea actual antes de que llegue el momento de pasar a la siguiente.

A medida que los niños sean capaces de pasar con éxito de una tarea a otra, incorpore el refuerzo positivo. El sistema de recompensas puede ser tan sencillo como un elogio adicional, tiempo con un objeto preferido o una ficha, como una pegatina, que pueden acumular y canjear más tarde por algo que les guste.

Elemento Actividades estructuradas Actividades de juego libre
Propósito Crear una rutina, reducir la ansiedad, fomentar la realización de tareas Fomentar la independencia, la creatividad y la toma de decisiones
Herramientas utilizadas Horarios visuales, temporizadores, reforzadores Juegos de rol, seguir el ejemplo del niño, estrategias NET
Función parental Guiar las transiciones, recompensar el éxito Participar sutilmente, modelar comportamientos, fomentar la exploración
Resultado Previsibilidad, seguridad, mejores transiciones de tareas Mejora de la comunicación, pensamiento flexible, crecimiento socioemocional

Flexibilidad y juego libre en el horario

Aunque a los niños autistas les gustan las rutinas, también es importante introducir cierta flexibilidad en los horarios. Ser demasiado rígido y estricto con la rutina a veces puede llevar a los niños a comportarse mal y a resistirse.

Por supuesto, hay partes del horario que no son negociables, pero cuanto más flexible puedas ser, mejor. Por ejemplo, puede que una mañana a tu hijo le apetezca mucho jugar con un juguete que le encanta, y permitirle que lo haga mientras preparas el desayuno en lugar de tenerle sentado a la mesa le demuestra que se valoran sus opiniones y preferencias.

También es parte integrante del juego libre, que enseña a los niños el poder de elegir.

También es importante incluir tiempo para el juego libre en la rutina diaria. Los niños lo ven en el horario y se entusiasman con ello, ya que pueden explorar su mundo en casa de la forma que elijan.

El hecho de que jueguen libremente no significa que usted no pueda participar o integrar el aprendizaje. Deja que tu hijo tome la iniciativa cuando juegue libremente y síguele representando papeles con él.

Esto les ayuda a fomentar la independencia y la creatividad, al tiempo que les enseña nuevas habilidades, les expone a nuevos escenarios y les ayuda a gestionar y modificar sus comportamientos.

Para ello, puede seguir los principios de la Enseñanza en el Entorno Natural, o NET, que es una estrategia básica de la terapia ABA. Algunos ejemplos son ayudar a los niños a practicar la petición de comida durante el juego para que puedan aplicar esas habilidades cuando llegue el momento de comer de verdad, o enseñarles a seguir instrucciones jugando a "Simón dice".

Blue Gems ABA ayuda a los padres a lograr el equilibrio en casa

La participación de los padres es una parte importante de la terapia ABA, ya que ayuda a reforzar los principios que se enseñan durante las sesiones para que las habilidades puedan generalizarse en casa y en otros escenarios. Enseñando a los padres algunas de las estrategias y herramientas que se utilizan en la terapia ABA, los terapeutas pueden ayudarles a apoyar mejor a sus hijos.

En Blue Gems ABAnuestro equipo de terapeutas experimentados puede ayudar a los padres a equilibrar la estructura y el juego libre en casa para que sus hijos con TEA se sientan valorados, aprendan independencia y creatividad y sigan desarrollando nuevas habilidades mientras se divierten.

Para más información Contacto hoy.

Preguntas más frecuentes (FAQ)

  • P: ¿Cómo empiezo a crear una estructura en casa?
    Utiliza un calendario visual con imágenes para mostrar las tareas diarias en orden. Sigue un horario coherente.
  • P: ¿Cuánto tiempo de juego libre debo dejar al día?
    Al menos 30-60 minutos, idealmente espaciados a lo largo del día para dar a los niños elección y autonomía.
  • P: ¿Se puede aprender durante el juego libre?
    Por supuesto. Utiliza los juegos de rol y la Enseñanza del Entorno Natural para desarrollar habilidades de la vida real en entornos lúdicos.
  • P: ¿Y si mi hijo se resiste a las transiciones?
    Utilice temporizadores visuales y avise con antelación. Refuerce las transiciones exitosas con elogios o fichas.
  • P: ¿Qué grado de implicación debo tener durante el juego libre?
    Deje que su hijo dirija. Únase sólo para modelar el comportamiento, ampliar sus ideas o introducir oportunidades de aprendizaje suaves.